Una vecina ha relatado que los chinos son “gente muy esquiva, que no trataban con nadie, sólo entre ellos, como un clan”.

Un hombre de 47 ha fallecido esta madrugada en un piso de este inmueble de una herida de arma blanca y la Ertzaintza ha detenido a cinco personas, también de origen chino, por el homicidio, cuatro de ellos en la vivienda y el quinto, y presunto autor del crimen, en la zona de las piscinas de la vecina localidad de Santurtzi.
Los vecinos de este inmueble, de ocho alturas y 16 viviendas de unos 120 metros cuadrados cada una, han explicado que en el piso donde se ha cometido el homicidio viven, en alquiler, en torno a una decena de personas de raza china, algunos de los cuales eran residentes “fijos” desde hace años y otros, “iban y venían”.
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