Los agentes de la Policía Nacional y Municipal de Madrid ponto detectaron los movimientos de los delincuentes: “Detuvimos a más de una docena, lo que consiguió disuadir, en parte, al resto de ladrones”.

Según publica El Confidencial Autonómico, los delincuentes rumanos aprovechaban las grandes aglomeraciones de peregrinos, para apropiarse de gorros, camisetas y mochilas con el logotipo de la JMJ.
El objetivo de esos hurtos era vestirse como los seguidores del Papa que vinieron a España, para hacerse pasar por uno de ellos, e ‘infiltrarse’ en los grandes grupos de católicos que recorrían la capital y poder hacerse con un ‘botín superior’. Las sustracciones más habituales fueron los bolsos, las carteras, los teléfonos móviles, y los tickets de comida que los jóvenes podían canjear en los restaurantes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario